A un volcán no quieres mirarlo directamente a los ojos, nos propone acercarnos a la montaña manteniendo la distancia que exige contemplar, dibujar y escribir sobre algo. Vemos su boca, pero ¿dónde están los ojos del volcán? Lagunas ocultas a través de la niebla; hay una voluntad de dejarse ver o no. No mirar directamente es no intentar arrebatar sus secretos, sino observar con respeto las señales de vida que se manifiestan a cierta distancia.

Proyecto ganador de Beca para
Proyectos Editoriales Independientes
Categoría: Libro de artista
IDARTES

Lugar: Volcán Galeras (Colombia)

Comprar aquí